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| Aleida Ortega |
En este mes patrio que por doquier hablamos de símbolos patrios, ofrendas florales y héroes hare mención de algunas mujeres de febrero en la lucha por la independencia nacional olvidadas por muchos pero que su valentía, entrega y amor a la patria las hicieron empoderarse de la lucha sin importar ofrendar sus vidas para la causa.
Es poco lo que dice nuestra historia de la participación de las mujeres en la lucha por la independencia nacional, sin embargo, protagonizaron un papel muy importante para lograr el nacimiento de nuestra República.
Como todos sabemos la trinitaria era una organización masculina como era la costumbre de la época, sin embargo, buscaron la manera de incluir a las mujeres en su proyecto independentista desde diversos escenarios, ya sea bordando la bandera, escondiendo en sus casas a los padres de la patria, preparando los cartuchos que se usaron en la memorable noche del 27 de febrero y llevando de un lugar a otro la pólvora escondida entre sus faldas.
Las febreristas respondieron al propósito libertador con la misma entrega de los trinitarios, llegando al punto de entregar sus vidas por la causa independentista.
Vamos a conocer los nombres de las mujeres que junto a los trinitarios hicieron patria:
Josefa Antonia Pérez (chepita), madre de Juan Isidro Pérez uno de los nueves trinitarios, en su casa se llevo a cabo la primera reunión para la formación de la sociedad secreta la trinitaria.
Los conspiradores pidieron a doña Chepita quien vivía frente a la iglesia del Carmen prestar su casa para realizar el encuentro.
Era imperativo evitar llamar la atención de las autoridades Haitianas, así que aprovecharon la ocasión aparentando que todos iban a la iglesia, mientras deliberaban doña Chepita vigilaba la calle asumiendo todos los riesgos que implicaba esta colaboración.
María Baltazara De Los Reyes, primera mujer soldado de la República Dominicana, estuvo presente con fusil en mano la noche memorable del 27 de Febrero. Cuando Duarte tuvo que esconderse de las autoridades Haitianas su casa fue su refugio. Fue tanta su discreción que ni la misma familia de Duarte sabia donde él estaba.
María De Las Angustias Villa, su casa fue refugio de Juan Evangelista Jiménez cuando visito el Cibao
María Trinidad Sánchez, Tía de Francisco Del Rosario Sánchez y junto a Concepción Bona confecciono nuestra bandera tricolor.
Concepción Bona
Desde joven dio muestra de amor a la patria confecciono la primera bandera que ondeo en el asta del baluarte de la noche gloriosa del 27 de febrero.
Manuela Díez, Madre del Juan Pablo Duarte, por solicitud de su hijo entrego al servicio de la causa partidista los bienes familiares recién heredados del padre lo que muestra la firmeza de sus ideales patrióticos.
El momento más jubiloso de Manuela fue cuando ya independizada la patria recibió en su casa a Juan Pablo Duarte. En aquella ocasión acepto el clamo de Sánchez de que no obstante al luto reciente abrieran las puertas de la casa repleta de gente, y se colocara una bandera en la ventana.
Rosa Duarte, hermana de Juan Pablo Duarte, miembro y colaboradora activa de la sociedad secreta la trinitaria fabrico junto a otras mujeres las balas que utilizo el movimiento esa noche gloriosa.
Juana Saltitopa Su carácter decidido e independiente se contagio con el ardor bélico de aquel momento en el que se recolectaban machetes para enfrentar el ejercito haitiano su arma era el machete, y en la batalla del 30 de marzo ocupo su lugar entre las combatientes. Le llamaban la coronela.
Ana Valverde Ella y su familia se opusieron a la ocupación haitiana. Después de la proclamación del 27 de Febrero como se esperaba un ataque haitiano esta valiente mujer se dedico a recabar fondos para reconstruir los muros de la ciudad de Santo Domingo.
Y de esta manera contribuyeron las mujeres al lado de los trinitarios a la separación de nuestro país del yugo haitiano.
Recordemos:
La Trinitaria no ha desaparecido esta en ti y en cada uno de las personas que nos sentimos ser Dominicanos(as).
Fuente El Jaya.
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