La Policía halló este miércoles los restos de un hombre, enterrado en un tanque de 55 galones, en una fosa del patio de una casa del sector Duquesa, propiedad del sicario Basilio Pérez Cuevas, quien junto a Kelvin Ramírez Castro fue abatido durante un enfrentamiento a tiros con agentes policiales en el ensanche Kennedy de esta Capital.
El portavoz policial, general Nelson Rosario Guerrero dijo que la casa era propiedad de Pérez Cuevas, uno de tres individuos que enfrentaron a una patrulla policial en el ensanche Kennedy el pasado domingo, donde murieron dos de los delincuentes.
Rosario Guerrero explicó que el cadáver fue encontrado dentro de un tanque de 55 galones, enterrado en el patio de una casa, propiedad de Cuevas Pérez, e indicó que continuarían las excavaciones, porque la Policía presume, por las informaciones que tiene, que hay más cadáveres.
Explicó que la casa era usada como centro de torturas por los sicarios, a donde llevaban personas para obligarlas a pagar deudas de forma compulsiva y para ejecutar muertes por encargo.
Explicó que la casa estaba ocupada por un haitiano, que huyó ante la presencia policial, y se encontraron ropa ensangrentada, zapatos, restos de celulares rotos y quemados.El vocero policial resaltó que al cadáver le echaron un químico para disimular el olor, y agregó que la Policía Científica sometería los restos encontrados a pruebas de ADN para identificar las personas a las que pertenecían.
El operativo de excavación fue dirigido por Ciriaco Núñez, del Departamento de Inteligencia Delictiva, y miembros de la Policía Científica y varios legistas pertenecientes al Instituto Nacional de Ciencias Forenses.
fuente El Nacional
Rosario Guerrero explicó que el cadáver fue encontrado dentro de un tanque de 55 galones, enterrado en el patio de una casa, propiedad de Cuevas Pérez, e indicó que continuarían las excavaciones, porque la Policía presume, por las informaciones que tiene, que hay más cadáveres.
Explicó que la casa era usada como centro de torturas por los sicarios, a donde llevaban personas para obligarlas a pagar deudas de forma compulsiva y para ejecutar muertes por encargo.
Explicó que la casa estaba ocupada por un haitiano, que huyó ante la presencia policial, y se encontraron ropa ensangrentada, zapatos, restos de celulares rotos y quemados.El vocero policial resaltó que al cadáver le echaron un químico para disimular el olor, y agregó que la Policía Científica sometería los restos encontrados a pruebas de ADN para identificar las personas a las que pertenecían.
El operativo de excavación fue dirigido por Ciriaco Núñez, del Departamento de Inteligencia Delictiva, y miembros de la Policía Científica y varios legistas pertenecientes al Instituto Nacional de Ciencias Forenses.
fuente El Nacional
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