En pleno centro de la ciudad está ubicado el parque Duarte de San Francisco de Macorís, obra que fuera construida durante el primer gobierno de Leonel Fernández en el 1997 y que se constituyó en uno de espacios públicos más majestuoso del país, sin embargo hoy día luce descuidado, sucio y sus tres fuentes abandonadas. El parque Duarte se ha convertido en la cama de muchos que no tienen un techo o que simplemente quieren echar una siesta y ante la mirada indiferente de los responsables de mantener el ornato de la ciudad esta área pública es el hogar de perros realengos que constituyen una fuente de contaminación para los visitantes.
Las fuentes que en sus inicios presentaban una belleza inigualable, siendo una de ellas la recreación de nuestra Loma Quita Espuela, hoy día sirven de espacio para la basura y para que los que lavan vehículos en los alrededores del parque guarden sus utensilios.
Recientemente un grupo de ciudadanos solicitó al concejo de regidores que le fuera entregado el principal parque de esta ciudad a fin de recuperarlo y usarlo para lo que fue construido, un espacio de esparcimiento para los francomacorisanos y visitantes.
Son las autoridades del ayuntamiento las responsables de volver a darle la importancia y la belleza que una vez tuvo este lugar, principalmente mediante la vigilancia y sobre todo en la noche.
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